En vivo y en directo, sin rencores ni temores,
la familia es el ejemplo más ejemplar
de la manipulación de los comentarios,
de cómo sacarlos de su contexto
y de enrollarlos hasta que el rizo no de más de sí.
Frente a la familia,
RECUERDA!!!
aunque a veces cueste,
tienes derecho a guardar silencio,
porque todo lo que digas se utilizará en tu contra.
No existe ningún derecho a abogado,
ni de oficio ni en tu beneficio.
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El otro día, una amiga me confesó que su familia le caía mal.
-Date por jodida.
De esos no te librarás nunca-
le respondí animosa.
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2 comentarios:
me gussssta este blog.
noelia, dile a tu amiga que incluso a la familia te la puedes quitar de encima. y no hay que hacer nada: sólo pídeles algo y verás como salen corriendo, jajajja.
Vale, se lo diré! Pero creo que además sus familiares no tienen mucho de lo que a ella le pueda interesar... está jodida la cosa.
Gracias, Marisona!
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